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Perder peso después del verano.

Una vez finalizado el verano nos ponemos manos a la obra para intentar quitar esos kilos de más. Pero es importante conocer que cuando se trata de perder esos kilos de más  no valen las dietas milagro, sino algunas pautas saludables que te da el Dr. Blanco que, mantenidas en el tiempo, nos harán ganar figura y salud nuevamente.

Las buenas noticias que le damos desde Nutriclinic es que podemos volver a nuestro peso ideal, sin agobios y con alegría, quitándonos esos 3 o 4 kilos de más, de media, que solemos echarnos a la espalda, o más bien a la tripa y las caderas cada verano. Según el Dr. Blanco, experto en nutrición y metabolismo, recuperar o comenzar un estilo de vida saludable puede ser sencillo si tenemos algunas ideas claras. La clave reside en una alimentación variada, saludable y de estilo mediterráneo así como respetar unas normas higiénicas dietéticas tanto de ejercicio como de descanso.

Con las pautas adecuadas no solo perderemos los kilos que nos sobran, también aumentaremos nuestras defensas, tendremos un cerebro más despierto, gozaremos de mayor estabilidad emocional manteniendo a raya el estrés y la ansiedad que genera el día a día, disfrutaremos de un descanso reparador y desarrollaremos más resistencia a la fatiga. Y todo, sin necesidad de pasar hambre ni ponernos a dieta, algo que se ha convertido ya casi en una rutina. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), hoy día un 45% de la población mundial se encuentra a dieta, y en España concretamente el porcentaje sube hasta superar el 50%.

Según el Dr. Blanco quienes se ponen a dieta sin un adecuado asesoramiento médico lejos de conseguir su objetivo solo se someten a periodos de hambre que les generan ansiedad, mal humor y poco tiempo después, un aumento de peso debido al temido efecto rebote, asociado a las dietas muy restrictivas. Son las consecuencias de todas las dietas milagro, más peligrosas que milagrosas.

La mejor dieta para bajar de peso es aquella que incluye una alimentación variada y equilibrada, esto quiere decir ingerir todos los grupos de nutrientes necesarios para nuestro organismo, todas las clases de vitaminas y minerales, proteínas, grasas saludables, hidratos de carbono y los imprescindibles aminoácidos esenciales que no puede sintetizar nuestro cuerpo. Estas condiciones la reúne la ya reconocida internacionalmente Dieta Mediterránea,  que es  el mejor ejemplo de alimentación saludable.

Para perder peso de forma saludable lo primero es comenzar por disminuir drásticamente las fuentes calóricas que ya no proceden, especialmente las cinco siguientes:

  • Azúcares (helados, zumos, refrescos, bollería industrial).
  • Grasas malas (fritos, salsa de queso, salsas como la mayonesa y salsa barbacoa).
  • Reducir el exceso de bebidas alcohólicas (en particular las bebidas destiladas por su alto grado de alcohol, ron, ginebra, vodka, tequila y los cocteles).
  • Harinas refinadas. El pan solo debe tomarse en el desayuno y siempre que pueda integral cuanto a las legumbres, hay que incluirlas, pero en ensalada, no en fabada ni potajes. Las pastas siempre que sean integrales mejor
  • Evitar los productos para picar -por ser muy ricos en sal- y los embutidos.

Consejos saludables para tu día a día en la alimentación.

  1. Toma los alimentos hervidos, a la plancha o en guisos con muchas verduras y poca grasa.
  2. Incluir proteínas mínimo dos veces al día: carnes, pescados, huevos y lácteos. Alterna los pescados azules con los blancos. Toma mejor aves que carne roja y procura que siempre esté bien hecha, pero no frita, mejor asada o a la plancha.
  3. No hay que evitar el aceite de oliva virgen extra o el aguacate, son grasas buenas y necesarias para el buen funcionamiento del organismo, pero hay que ingerirlas con moderación.
  4. Come el arroz, la pasta y las patatas en ensalada y con verduras. Y un consejo de experto: "Si la preparo el día anterior a ingerirla, el almidón se ha hecho resistente y no engorda". Si se toma arroz, pasta o patata no se debe comer pan.
  5. En cuanto a la fruta, mejor tomar piezas enteras, no zumos ni batidos, que contienen mucha azúcar y nada de fibra.
  6. Bebe mucho líquido entre comidas ya sea agua, infusiones, caldos entre otros, de media, unos dos litros diarios.
  7. Está permitida una copa de vino tinto al día, es un protector cardiovascular y elimina toxinas; pero más de una o dos copas al día tienen el efecto contrario.
  8. Masticar bien los alimentos es un paso muy importante para hacer una buena digestión. La salivación y la trituración es esencial, para una buena salud digestiva y porque la sensación de saciedad no aparece inmediatamente, sino a los 20 minutos de empezar a comer, por lo que hay que darle tiempo al cerebro de avisar al estómago de que ya está lleno.
  9. Los hidratos de carbono solo deben tomarse en el desayuno y en la comida.
  10. En la cena, mejor tomar verduras cocinadas que crudas, para facilitar la digestión. Hay que acompañarlas de proteínas de alto valor biológico (mejor pescado que carne).
  11. Cenar lo más pronto posible y dejar pasar al menos dos horas antes de acostarse.

Junto a una dieta sana y equilibrada, el ejercicio y el descanso son las otras dos claves de las que depende mantenernos en un peso saludable. En este sentido, uno de los deportes más saludables y asequibles es caminar. Un paseo a buen ritmo de una hora diaria puede ayudarnos a perder mucho peso. ¿Cuánto? Según un estudio de la Universidad de Harvard, publicado en Harvard Health, con un peso de 57 kilos se queman 120 calorías andando a 5,5 km/hora en un terreno llano durante 30 minutos, una cifra que llega a las 149 calorías si se pesan 70 kilos. Es decir, con un paseo a buen ritmo de una hora diaria se puede perder un kilo al mes.

Además del ejercicio, el descanso también es importante a la hora de perder peso. Hay que procurar acostarse todos los días más o menos a la misma hora, lo ideal antes de las once de la noche, para adaptarnos a los ciclos circadianos y mantener en óptimas condiciones nuestro estado de salud. El estilo de vida saludable caracterizado por una alimentación sana, práctica regular de actividad física, no fumar y evitar el exceso de bebidas alcohólicas, conseguir un sueño reparador mínimo 7 horas diarias, minimizar el estrés, te permite normalizar tu peso y mantenerlo en el tiempo después de un verano que muchas veces nos lleva al exceso y como consecuencia aumentamos algunos kilos de más.

Por favor si estás interesado en iniciar un tratamiento de pérdida de peso ponte en contacto con nuestra clínica en el teléfono 680742267 y pide cita para el Dr. Blanco.

Peeling Químico Facial

A partir del 1 de Octubre comienza la temporadas de borrar las imperfecciones de la piel provocadas por los rayos del sol del verano, ¡comienza la temporada de Peeling!

Rejuvenecimiento físico-químico de la piel. Peeling químico!
El peeling consiste en la eliminación de una parte de la epidermis o dermis a la que sigue una regeneración natural del tejido. Para hacerlo seleccionamos un agente químico según su intensidad y a la profundidad de la piel a la que queramos llegar.

La técnica elimina y corrige:

- Manchas cutáneas de cualquier origen.
- Pequeñas arrugas y aporta la luminosidad que la piel ha podido perder debido a la acción del sol, la fatiga, el estrés o el proceso natural de envejecimiento.
- Fuerza la hidratación natural de la piel.
- Elimina las marcas del acné y cicatrices.
- Unifica el tono de la piel, será más lisa y homogénea.
- Mejora el acné.

En términos generales, el peeling mejora la calidad de la piel y aumenta la producción de colágeno y elastina, componentes esenciales para mantener la piel suave y firme.

Existen diversos tipos de peeling en función de la imperfección que necesitemos corregir y esto lo decidirá el Dr. Blanco en una visita informativa gratuita donde le indicará el Peelling más adecuado para usted.

Precios:

PEELING CON ÁCIDO GLICÓLICO: Precio 71 euros
PEELING CON ÁCIDO SALICÍLICO: Precio 71 euros
PEELING CON ÁCIDO TRANEXÁMICO: Precio 89 euros

PEELING CON ÁCIDO TCA: Precio 131 euros